Las personas voluntarias en España
El Observatorio del Voluntariado ha publicado su informe anual sobre el perfil de las personas voluntarias en España. A continuación, compartimos algunas de sus conclusiones.
El informe indica que un 10,5% de la población española mayor de 14 años (4.400.000 personas) está vinculada al voluntariado. El 58,4% de las personas voluntarias son mujeres. Las mujeres suelen vincularse más a los cuidados y los hombres al voluntariado cultural, deportivo, al voluntariado internacional y a la cooperación para el desarrollo. De los 10 ámbitos del voluntariado, los que más suscitan interés son el social (56,7%), el socio-sanitario (12,2%) y el cultural (11,5%).
El perfil de persona voluntaria es el de una mujer con empleo, de entre 35 y 54 años, con ingresos altos, que reside en una ciudad con más de 200.000 habitantes y se dedica a ello desde hace 5-10 años.
En cuanto a la vinculación con entidades, casi el 49% de las personas encuestadas colabora con más de una organización. Además, más del 50% participa en el voluntariado desde hace más de 5 años.
Sin embargo, la mayoría de las personas encuestadas no se vincula a iniciativas vecinales o ciudadanas. Además, las mayores limitaciones para realizar voluntariado son: falta de tiempo, desconfianza con las ONG, falta de información, desconocimiento, cargas familiares y la falta de interés. Un porcentaje elevado de encuestadas no realizaría voluntariado el próximo año.
Para afrontar estas limitaciones se podría: fomentar alianzas entre organizaciones, potenciar la presencia de la entidad a nivel comunitario, promover el voluntariado digital, publicar las memorias anuales, facilitar un kit de bienvenida a las personas voluntarias o difundir experiencias de voluntariado.
En definitiva, el informe muestra que las personas voluntarias en España consolidan una visión fundamental de compromiso para la sociedad. Sin embargo, se encuentran barreras que limitan su expansión. Estos datos facilitan que las organizaciones diseñen una hoja de ruta para reforzar su presencia comunitaria, mejorar la comunicación y diseñar propuestas más flexibles, accesibles y que impulsen una participación más amplia y sostenida.
