Día Mundial de las Personas Cuidadoras: cuidar también es salud
Cada 5 de noviembre se conmemora el Día Mundial de las Personas Cuidadoras. Una jornada dedicada a visibilizar a quienes dedican tiempo, energía y afecto al cuidado de personas en situación de dependencia. Tal como destaca Infobae, el acompañamiento constante, la carga emocional y la falta de descanso pueden derivar en agotamiento físico y mental si no se cuenta con redes de apoyo adecuadas.
El síndrome del cuidador quemado o burnout afecta a miles de personas, especialmente mujeres, que asumen el cuidado de familiares mayores o enfermos crónicos. Reconocer sus señales —como la fatiga constante, la irritabilidad o la pérdida de motivación— es fundamental para prevenir consecuencias más graves. En este sentido, promover el autocuidado, el acceso a recursos de salud mental y la formación en estrategias de afrontamiento resulta imprescindible.
Desde las delegaciones de Solidaridad Enfermera se trabaja ofreciendo espacios de sensibilización y formación a las personas cuidadoras. Impulsamos proyectos que dotan de información y herramientas a estas personas. Haciendo hincapié en el autocuidado contribuyendo así a mejorar no solamente su día a día cuidando sino también su bienestar y calidad de vida.
La investigación enfermera también desempeña un papel clave en este ámbito. La tesis doctoral de Patricia Ferrero analiza la calidad de vida de cuidadoras informales de personas con enfermedad de Alzheimer y evalúa la eficacia de las intervenciones tecnológicas en la calidad de vida de las cuidadoras.
Por su parte, Jenifer Malumbres, en su tesis doctoral evalúa el efecto de intervenciones educativas en cuidadoras formales no cualificadas que atienden personas que manifiestan deseo de adelantar su muerte.
Ambos trabajos reflejan el compromiso de la enfermería con el cuidado de quienes cuidan. Un enfoque que trasciende la asistencia clínica para adentrarse en el terreno de la investigación, la empatía y la transformación social.
En este Día Mundial de las Personas Cuidadoras, recordamos que cuidar también implica cuidar de uno mismo. Y que además, el apoyo institucional, comunitario y científico es esencial para sostener a quienes sostienen la vida de otros.
